Homofobia

28 04 2008

Todavía vivimos en una sociedad bastante homófoba. En ocasiones, la intolerancia se viste de amable permisividad pero, en el fondo, late el rechazo y la discriminación hacia la homosexualidad. No es extraño escuchar en ocasiones expresiones como «si yo tuviera un hijo o una hija homosexual, lo echaría de casa».

Poco a poco, la gente va dándose cuenta de que no tiene ningún sentido la homofobia pero todavía queda mucho por erradicarla. A veces, escuchando expresiones como las anteriores en las clases, pienso que hemos evolucionado poco. Como muestra un botón…: en el vídeo que se puede ver a continuación -de Informe Semanal- , algunas opiniones homófobas grabadas en 1981. Nos separan 27 años, pero a veces, a juzgar por lo que se oye, no lo parece.

Educar en el respeto a la diversidad sexual no es fácil. Hay que ir en contra de la corriente. Pero creo que merece la pena. Si estás de acuerdo, firma nuestro manifiesto por la Diverxidad.

Y para todas aquellas personas que no tengan claros estos conceptos, la guía de XEGA.


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25 responses

29 04 2008
Juan Ángel

Me emociona este video. Pese a tu punto de vista -que aún haya mucha gente homófoba- la cosa ha mejorado mucho. En serio que me ha emocionado.

29 04 2008
Hannah

Este tipo de vídeos no tiene ningún valor, puesto que no contienen ningún tipo de información estadística. Lo mismo se puede poner a gente intolerante que a gente sin prejuicios. O peor aún, a gente intolerante que tenga el aspecto A y a gente sin prejuicios que tenga el aspecto B y después decir: «veis, los A son intolerantes, mientras que los B son muy majetes». Eso tiene casi tan poco valor como los documentales de Michael Moore acosando cruelmente a un anciano con Alzheimer. Las imágenes mienten (¿no enseñaba eso Platón?) Las estadísticas bien hechas informan. Será deformación profesional, no sé.

Por otro lado, creo que hemos avanzado mucho, como dice Juan Ángel. Si hasta entre los alcaldes de MAdrid había homofobia.

Por otro lado, creo que no tengo ningún tipo de rechazo hacia nadie por su orientación sexual, pero reconozco que prefiero que si un día tengo hijos o hijas sean heterosexuales. No es homofobia, es pura cuestión de gustos, de preferencias subjetivas. Tampoco creo que deba justificarlo, dado que no propongo marginar a nadie. Sin embargo, alguna vez he declarado esto mismo y me han acusado de homofobia «inconsciente» o de «cripto-homofobia» (¡), pero no creo que estas acusaciones tengan sentido.

29 04 2008
juanat

JUAN ANGEL:
Me alegro que te haya gustado el vídeo.

HANNAH:
Por supuesto que cualquier información puede estar sesgada y mucho más las imágenes, efectivamente. Pero mi idea «contrastada» después de casi quince años dedicándome a trabajar el tema de la homosexualidad me dice que hay más homofobia de la que esta sociedad «supuestamente correcta» quiere admitir. Cuanto más jóvenes son los alumnos (y en este caso remarco el género masculino) más explíxitamente muestran la homofobia. Luego, la presión social, la corrección, etc…hace que mucha gente que sigue siendo homófoba no lo demuestren tan claramente.
Los adolecentes homosexuales sufren un grado mucho mayor de violencia que los heterosexuales…Según un estudio de XEGA XOVEN «el 45 % de adolescentes gays han sufrido violencia física o verbal en la escuela y tienen 3 veces más riesgo de suicidio que sus compañeros, escuchando habitualmente el 97 % comentarios homófobos de sus compañeros».
En ocasiones paso encuestas al alumnado y, por poner un ejemplo, hace unos tres años, a la afirmación «la homosexualidad es una forma como otra cualquiera de vivir la sexualidad», el alumnado de 4º ESO y 1º bachillerato consideró…el 20% de las chicas que no -o se mostraban indiferentes-, y el 56 % de los chicos: casi el triple.
Me parece que son algunos datos que materializan mi idea acerca de la homofobia existente.

30 04 2008
Razzo

La otra vez en una mesa redonda de mi facultad discutiamos si los homo pudieran adoptar, yo era de los pocos q decia q estaba d acuerdo puesto q algunos podrian funcionar mejor q una pareja conflictiva hetero. Las opiniones de gente de 18 – 20 no eran muy tolerantes ni objetivas. La gente se deja llevar x el q diran, la religion pero todavia no pueden pensar x si mismas en lo q esta bien y mal.

30 04 2008
juanat

Efectivamente RAZZO:
La gente se deja llevar mucho por el «qué dirán» aunque sea gente joven. En ese sentido hemos cambiado menos de lo que se suele pensar.

30 04 2008
Hannah

Estar en contra de la adopción por parte de parejas homosexuales es algo distinto de la homofobia, de igual manera que no dejar votar a los jóvenes de 17 tampoco es odio a la juventud.

Además, tampoco significa incapacidad para pensar por uno mismo, ni de pensar por supuestos religiosos. Incluso más… estar a favor de la adopción por parte de homosexuales, tampoco es sinónimo de independencia de pensamiento, ni de ser más ilustrado, ni de nada de nada. Tan sólo son opiniones distintas para las cuales hay buenos y malos argumentos. Pero me hace gracia cómo tantas personas cuando se trata de opiniones contrarias a las suyas van y te salen con que si los otros tienen prejuicios, que si la religión, que si la intolerancia, etc. Creo que deberíamos defender nuestras ideas con argumentos, no con descripciones del contrario.

Y por si a alguien le interesa mi humilde opinión, tengo serias dudas sobre si se debe permitir adoptar a parejas homosexuales. Puedo aceptar que haya parejas homosexuales mejor que parejas heteosexuales conflictivas ¡Por supuesto! Pero espero que tengan mejores argumentos, porque nadie está pidiendo que se permita adoptar a parejas heterosexuales conflictivas, por lo que la comparación con éstas posee muy poca fuerza.

1 05 2008
juanat

HANNAH:
Yo creo que la religión todavía influye muchísimo en nuestra forma de pensar. Muchas veces me encuentro en clase con alumnos/as que dicen ser ateos y que defienden argumentos que la Iglesia ha defendido..y ellos no son conscientes de esa dependencia ideológica que nos ha marcado y marca tanto.
Por otro lado, creo que el único argumento para favorecer la adopción en las familias homosexuales es que son dos personas que eligen vivir juntas porque se quieren y quieren educar a un niño o niña en el respeto a los demás. Ese debería ser el fundamento básico, creo yo, para cualquier pareja a la hora de educar a un hijo. Lo que comentan muchas veces los chavales cuando tratas el tema en clase es que cuando ese niño vaya al colegio se reirán de él. Pero es que la clave para no reirse está en nosotros. Así que somos nosotros los que debemos empezar a cambiar esos prejuicios.

2 05 2008
Hannah

Profesor: el problema que yo veo en su argumentación es que una buena parte de ela es «ad hominem». Invalidar una opinión porque coincide con opiniones mantenidas por la Iglesia es una forma débil de invalidar una opinión. Si un alumno defiendie «inconscientemente» un argumento que la Iglesia ha defendido, la debilidad de su argumento no reside en esto último, sino en el propio argumento. ¿No le parece?

Por otro lado, me hace gracia lo de la religión como fuente de prejuicios. ¡Cómo si fuera la única fuente! ¡Y como si bastara con abandonar la religión para abandonar cualquier peligro de exposición a los prejuicios! Hay prejuicios que proceden de la religión, y hay muchos otros que proceden de otras muchas ideologías o, simplemente, hay opiniones que son prejuicios en sí mismas, sin necesidad de proceder de la religión. Por eso me hace gracia que en algún mensaje se exprese como si estuviera por encima del común de los mortales:

Por ejemplo, dice: «la gente se deja llevar mucho por el “qué dirán” aunque sea gente joven.»

Y yo ahora me entero de que soy gente, pero que vd. no lo es. Lo siento, pero me parece que hay algo mucho más incorrecto que su combatido masculino genérico, y es cuando alguien empieza a hablar en tercera persona de «la gente» para señalar defectos que no posee o errores que no comete. Esa es una forma tramposa (o sea, basada en la retórica y no en las ideas) de llevar razón.

Y por fin, el argumento. Dice:

«creo que el único argumento para favorecer la adopción en las familias homosexuales es que son dos personas que eligen vivir juntas porque se quieren y quieren educar a un niño o niña en el respeto a los demás»

Eso sería así si el problema principal fuera el derecho de dos personas gays a adoptar. Pero el problema aquí (el problema principal) es que no hablamos de un derecho de la pareja que adopta, sino del adoptado. El problema, tal como yo lo entiendo, es que la cuestión de la idoneidad de los adoptantes es previa a la reivindicación del derecho a adoptar.

La pregunta, por tanto, es: ¿son las parejas gays tan idóneas como las parejas heterosexuales a la hora de adoptar?

No vale decir que hay parejas heterosexuales que son horribles, porque es verdad, pero no estamos comparando a parejas gays estupendas con parejas hetero horribles, sino normales y más o menos sólidas y responsables.

Su opinión parece ser bastante típica, si yo la entiendo bien: basta con la voluntad de los padres adoptivos. Y precisamente, yo tengo dudas de que baste con manifestar esa voluntad, por muy respetable y muy valiosa que ésta sea.

Lo que yo sospecho es que la mayoría de quienes nos hemos educado con un padre y una madre nos hemos beneficiado de la diversidad sexual de nuestros progenitores o tutores: un hombre biológico y una mujer igualmente biológica. De hecho, no conozco a nadie que me haya reconocido que le habría dado igual tener dos padres o dos madres. Se me dirá que tampoco suele conocerse a personas que hubieran querido «otra madre» y «otro padre» y que, por tanto, eso sólo significa que nos cuesta imaginarnos, y más aún desear, otros padres que los que precisamente nos toca. Pero creo que esto no es verdad. Durante la adolescencia es muy común que entre amigos envidiemos la suerte que otros tienen con sus padres, o que nuestros padres poseyeran algunas de las virtudes que vemos en los padres de los demás. Por ejemplo, yo odiaba que mis padres no me dejaran regresar tan tarde como a algunas de mis amigas, o que mi madre fuera un desastre cocinando, o que fueran al Instituto a hablar de mí con los profesores. ¡Que suerte tenían algunas de mis amigas! Lo que nunca desee es que mis padres fueran del mismo sexo. Ni siquiera si, como recompensa hipotética, con ello me hubieran dejado regresar a al hora que me hubiera apetecido. Pues bien, yo no estoy nada segura (y no es que me oponga, es que tengo dudas, y creo que son razonables) de que por dar un derecho a las parejas homosexuales (algo que en principio está bien) debamos hacer que un niño acabe envidiando a los niños que tienen padres de ambos sexos. Y no me estoy refiriendo a compañeros crueles que se ríen de él.

Supongo que aquí el tema es si preferimos un padre y una madre por pura costumbre social. Y también, si dos padres o dos madres pueden ejercer roles distintos porque esos roles sólo son culturales y, por tanto, pueden ser aprendidos. Pero cada vez está menos claro que las diferencias de conducta de hombres y mujeres sean un producto cultural sin más. Ni siquiera que sean ante todo un producto cultural. Es una de las cosas que más he estudiado este año, por mi cuenta, y estoy asombradísima de la cantidad de diferencias que hay entre hombres y mujeres que tienen un origen neurológico, no cultural. Creo que debemos entender muy bien todo esto antes de permitir la adopción a parejas del mismo sexo.

Por otro lado, creo que también hacen falta estudios reales, empíricos, de qué es lo que ocurre. Existen pocos casos, pero deberíamos estudiar con muco detalles los casos, por ejemplo de lesbianas (evidentemente para una mujer es más fácil tener un hijo y después vivir con otra mujer) y ver qué pasa. Pretender tener la verdad antes de haber estudiado qué pasa en estos casos, es un prejuicio. Pero también lo es dar por hecho que no habrá problemas, que no tendrá consecuencias para el niño simplemente porque eso cuadra mejor con nuestra visión ideológica del mundo.

Personalmente, hoy por hoy, dejaría el tema en suspenso y a la espera de estudios objetivos y continuados en el tiempo de niños adoptados por padres del mismo sexo en todo el mundo. Todo lo demás me parecen prejuicios: prejuicios de quienes se oponen porque sí y prejuicios de quienes están a favor porque sí también: porque la Iglesia o la religión en general no es la única fuente de prejuicios. El progresismo de saldo es otra importante fuente, por cierto (o lo decía o reventaba, lo siento).

Perdón a todos por la extensión de este comentario.

3 05 2008
Juan Ángel

Hum, hum… Creo que es incorrecto quitarle culpa a la Iglesia institucional, y es que es innegable que ellos son quienes llevan la voz cantante en la lucha con el «lobby gay» que llaman.

Estoy completamente seguro, para empezar, de que lesbianas y gays puedan estar en pareja donde les salga de las narices, siempre y cuando tenga lo que se le exige a cualquier pareja heterosexual: un amor adulto y respetuoso. Y que no se me salga con aquello de que un niño si ve a una pareja gay se va a traumatizar o, aún peor, contagiar: también se ven a drogadictos por la calle y no por ello se hacen drogadictos (válgame el cielo el ejemplo que acabo de poner).

Sin embargo, he de reconocer que la adopción de niños por parte de parejas homosexuales es el único punto de los derechos de los gays y lesbianas que no tengo claro, pues está el niño en medio. No lo tengo claro, pero casi.

Para empezar, a un niño se le debe enseñar de una forma neutral: explicarle las cosas claras y como son (o al menos desde mi punto de vista). Igual que a un niño no creo que se le deba educar en religión alguna (si acaso mostrarle todas), no creo que se eduque en una sexualidad. Si algo está claro a estas alturas es que la homosexualidad es una condición natural, y, al igual que el niño vería UNA pareja homosexual en su casa, vería a CIENTOS en la calle, y si de veras se hace una educación, como digo, neutral, el niño no debería inclinarse a una u otra tendencia, sino vivir con naturalidad. No certificaría que esa tendencia hacia la homosexualidad la tuvieran en mayor medida, porque no soy experto, pero lo que sí que tal vez ocurriría sería que, en el caso de que fuera homosexual, pudiera vivirlo con naturalidad, sin pasar por traumas que podrían llevarle incluso al suicidio.

Además, pues claro que la primera generación se sentiría discriminada, pero es un pequeño sacrificio, primero, solventable con cariño y razón, y segundo, necesario absolutamente para la aceptación social, al igual que la mujer se sintió -y lo peor, que se sigue sintiendo- discriminada en múltiples campos sociales por el simple hecho de haber nacido mujer.

Lo único que tengo claro es que, cuando tenga un hijo, le enseñaré, al menos, en el respeto: que respete todo y a todos, que razone. No le daré paquetes de ideas: se lo mostraré todo y que escoja lo que le de la gana. Y le enseñaré que lo que es una persona lo es por sus decisiones, y no por haber nacido con una oreja más grande que la otra, tener los ojos verdes o por ser homosexual.

Lo sé, me desvío mucho del tema, pero es que tiene para rato. Un abrazo.

4 05 2008
Hannah R

Juan Ángel, no se trata de quitarle culpa a nadie. De lo que se trata es de no invalidar un argumento o una opinión simplemente porque lo sostenga la Iglesia y porque ya hayamos etiquetado a esa Iglesia como fuente de prejuicios. No digo que la Iglesia no tenga prejuicios, sino otra cosa muy distinta: una, que no es la única que los puede tener y, dos, que en un debate los argumentos «ad hominem» no son aceptables. Y descalificar una opinión porque la la Iglesia la sostiene o porque coincide con algo que también sostiene la Iglesia es eso: un argumento «ad hominem».

Y en eso es en lo que creo oque incurre el profesor cuando dice cosas como:

Muchas veces me encuentro en clase con alumnos/as que dicen ser ateos y que defienden argumentos que la Iglesia ha defendido..y ellos no son conscientes de esa dependencia ideológica que nos ha marcado y marca tanto

O sea, rebatir una opinión, no por ella misma, sino porque manifiesta una «dependencia ideológica» respecto a la Iglesia etc. ¿Y qué? Si la opinión es débil o está errada, lo será por otro motivo, no por coincidir, o por depender ideológicamente, o lo que sea, con la Iglesia.

Es absurdo valorar así las opiniones. Y es un error, creo, pensar que la Iglesia es la principal generadora de prejuicios en nuestra sociedad. ¿Por qué no el progresismo, ya puestos? En todo caso, las opiniones merecen ser discutidas, no descalificadas o aceptadas dependiendo del carácter ideológico o religioso de quienes las sostienen. Eso es lo que quiero decir.

Dices que a los niños no se les debe hablar de religión. ¿Y por qué no? ¿No te parece un poco totalitario decirles a los padres de qué les deben hablar a sus hijos o en qué creencias deben o no deben educarlos? Mis padres me educaron en su religión (no son católicos, por cierto, ni siquiera cristianos) y a mí, aunque tengo dificultades para creer en un Dios, me parece estupendo. Lo que me habría parecido horrible es que alguien, desde fuera, y mucho menos el Estado o una comisión de pedagogos o profesores, les hubiera dicho que no debían hablarme de su religión o, en todo caso, hablarme de todas por igual.

La neutralidad con los hijos no existe. Inevitablemente se les educa en aquello en lo que se cree. Otra cosa es que se les trate de inculcar respeto por quienes opinan de forma diferente. Sin duda, eso es bueno. También se les pueden enseñar ideas distintas a las nuestras, peor es inevitable presentar nuestras opiniones y las ajenas de distinta forma. Tampoco creo que haya nada especialmente malo en ello. Los niños, además, quieren creencias, no dudas metódicas ni suspensiones de juicio.

Además… ¿por qué no extender lo que dices sobre religión a lo ideológico y lo político? ¿Les dirás a los padres socialistas que no deben hablarles del socialismo a sus hijos? ¿Les dirás a los padres liberales que no les hablan del liberalismo? ¿Les dirás a los padres conservadores que les digan a sus hijos que sus opiniones políticas tienen el mismo valor que las de sus adversarios? ¿Serás tú neutral ante tus hijos cuando les hables de la Iglesia o que quienes, según tú, están equivocados? Lo siento, pero a mí ese discurso de pretender que los padres eduquen a sus hijos en la asepsia ideológica y religiosa me parece, en el mejor de los casos, ingenuo. En el peor, totalitario.

5 05 2008
Laura 4a

Pienso que en la actualidad sigue habiendo gente homofoba pero mucha menos que en años anteriores.Creo que la educación esta influyendo mucho en este cambio de la mentalidad de la gente, pues la gente joven es mucho mas comprensiva y tolerante en estos aspectos. Aunque todavía queda mucho camino por recorrer y siempre quedará alguien con estas ideas.

Saludoos!

6 05 2008
Lucia 4A

En mi opinion creo que si hay homofobia en ello influye mucho la educacion de cada persona lo que le llev pensr de diversas formas.
Aunque la gente siempre se preocupa por el que diran de los demas y por ello siempre hay ese miedo!
Pero tambien hay muchas personas que lo superan y con el paso de los tiempos todo esto se aprobara!
saludos!!!

6 05 2008
Erika 4D

Hola
Creo que todavía hay demasiada gente homófoba y me parece increíble que en el año 2008 halla opiniones acerca de la homosexualidad prácticamente iguales a las de hace 27 años, no puedo entender como hay tantas personas que rechazan a los homosexuales por ser distintos a ellos, solo por sentirse atraidos por personas de su mismo sexo, esto no los hace ni mejores ni peores que los heterosexuales y por eso no se los debe ni de rechazarlos ni discriminarlos.
Todo esto es por la educación, la gente y la sociedad va evolucionando lentamente, pero demasiado lenta . Y eso de decir que los homosexuales estan enfermos o que se deben que esconder … estas ideas retrogradas tienen que desaparecer cuanto antes, aunque será muy dificil.
Un saludo

11 05 2008
jairo 3c

para mí los homosexuales son personas como nosotros solamente que a ellos les gustan los hombres

15 05 2008
kikoprieto

A jairo 3c:
Más bien diría yo que les gusta lo femenino de algunos hombres (ellos) o lo masculino de algunas mujeres (ellas).
Es el escaparate que presentan los rasgos humanos, y luego ellos, que se dejan llevar por los sentidos y la cogitativa (no usan la inteligencia ni la voluntad), caen…

26 05 2008
abel 4c

si hay homofobia yo creo qe es porque viene de otras sociedades de otras tradiciones y de otras culturas pero esto hay que ir remediandolo poco a poco con el paso del tiempo.

shit

27 05 2008
Estefanía

ola!
Pues bueno, yo creo que todavía hay mucha gente que es homofoba.
Las personas que somos más jovenes ((habiendo alguna escepción)) somos menos homofobas. Nuestra educación nos enseña a respetar a la gente aunque sea d diferente raza, color,religión,…..
Aunque todavia se puede mejorar bastante.
un saludo!!
fanny

4 06 2008
sergi

ola
yo creo q los homosexuales son persona igual q nosotros y tienn q ser respetados como a cualquiera

4 06 2008
noe

creo k mucha gente todavia es homofoga pero nosotros (los jovenes)no tanto

9 06 2008
Samanta 4B

Hola a todos:
lo primero decir que para mi todos somos iguales y k no importan los gustos.
lo segundo decir todas aquellas personas que dicen que si tiene un hijo así lo echan de casa o cosas asi me parece absurdo porque un hijo no es una persona cualquiera y creo que los padres sobre eso no tienen nada que decir.
y tercero y ultimo decir que apoyo a todas esas personas porque no son malos ni mucho menos, hombre habra de todo pero bueno jeje
un beso

28 10 2008
Laura 4C

En mi opinión ser homosexual no es malo, simplemente antes estaba peor visto que ahora… Antes habia el mismo número de personas homosexuales que ahora, la diferencia es que se tenían que ocultar más. De todas formas mucha gente todavía lo oculta por miedo a lo que diga la gente. La gente joven suele ser más tolerante en ese sentido…
Un saludo

29 10 2008
juanat

LAURA:
El problema es que muchos/as homosexuales tienen que seguir ocultándose. Efectivamente, la gente joven va siendo más tolerante pero todavía hay muchos prejuicios.

27 11 2008
Cristina 4c

Hola!!
Bajo mi punto de vista este tema es muy delicado de hablar hoy en dia (aunqe hace años los homosexuales eran peor tratados y discriminados si reconocían su homosexualidad) siguen siendo discriminados por su sexualidad y a menudo son insultados y humillados.
A mi no me parece mal, no discrimino a la gente por su sexualidad. La gente homófoba es una intolerante que no saben respetar a la gente que viven a su alrededor.
Yo creo que tendria que haber mas actividades que concienciasen a la gente sobre la homosexualidad y que le abriera los ojos a las personas que no tienen respeto a ellos. Que vean que son personas normales y que tienen una vida normal…
UN saludo!!

28 11 2008
kikoprieto

A todos: Lamentablemente en los 23 comentarios que se han vertido solo hay tres que digan algo sensato sobre el tema. El resto adolecen de profundidad. Basta ya de tópicazos «hay que respetar a los homosexuales…»bla, bla…
Yo no quiero que me respeten quiero que me quieran y que me digan la verdad.
Yo digo, ¿para qué quiero yo que me digan que soy feliz si en el fondo sé que no lo soy?

28 11 2008
juanat

KIKO:
Entiendo que estás harto del «lenguaje políticamente correcto» que se utiliza en ocasiones sin ser de verdad algo que exprese lo que realmente piensa esa persona????

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